martes, 19 de junio de 2007

Jazz

Suena un jazz mientras escribe.
Junto al teclado, un cenicero con algo para fumar.
Sus dedos escriben, casi sin pensarlo.
La música, algo de Billy Taylor,
alegra lo que hasta ese momento había sido un día desastroso.
Teclea al tiempo que el piano.
En su mente, evoca una noche con sus amigos.
Risas, cantos y, por que esconderlo, algo de alcohol.
Siente que tiene suerte:
una familia, algo complicada, pero agradable,
a la que quiere, a su manera;
unos amigos, los de verdad,
que lo animan en lo malos momentos,
y con los que ríe a menudo.
No tiene una chica a la que querer,
pero sabe, que por el momento esta bien.
Cree que las cosas pueden ser mejor,
pero de momento, disfruta lo que tiene.
Es feliz.

2 comentarios:

Charles X dijo...

Curioso,no se por que, acabo de recordar cierta cancion hiphopera que tienes que hacer. No, no me preguntes por que saco esto ahora, solo se que el pinzamiento cervical y la faringitis me vuelven inestable.
El texto, como siempre, correcto.
Un saludo

isidro dijo...

Muy bueno. Hoy, ahora, y seguramente solo en este preciso instante me identifica bastante.

Me ha llegado camarada.

Solo que a mi el jazz me la deja morcillona. Prefiero Rock del duro.