viernes, 19 de diciembre de 2008
Un Último Adiós
Corro, guiando mis pasos a lejanos valles y montañas. Buscando un mar donde embarcarme a un destino aún por definir, escapando de un sentimiento que antaño me dio felicidad, aunque en la mayoría de las veces pena y tristeza.
Cuatro letras que forman una palabra que mis oídos intentan no percibir y mi corazón lucha por expulsar.
Basta de tormentos, basta de desengaños. Estoy hastiado, cansado de no saber nunca si el barco donde mis esperanzas viajan llega a buen puerto. Quiero sacar de mi alma ese sentimiento por el que tantas veces he derramado lágrimas. Quizás ahora no fuera como otras veces, no hubo tiempo para ello, y sin embargo esta historia tiene regusto a fracaso. Una sensación que tantas veces mis labios han probado.
Palabras que nunca debí decir, que nunca debí sentir, fueron dichas una vez más, dando paso a la agonía de enfrentarme al día a día en soledad.
Al abrigo de la noche, una vez más debo aullar a Selene y esperar que, bañado en sus rayos, pase el tiempo.
Son tantas la veces que mi alma ha pasado por esto, que apenas le sorprende.
Libraré batallas en compañía de los míos, pero no quiero verte por mucho tiempo. Por eso te rechazo. Reniego de ti. Vete y dejame estar a solas. Si he de surcar los mares de la vida sin más tripulacion que mi ser, tampoco quiero que estés en mi barco. No eres bienvenida.
Adiós.
domingo, 19 de octubre de 2008
"Música" y "Pensando en ella escribo"
Un coro celestial pronuncia su nombre.
Ella lo mira. Roza sus labios con sus dedos Acaricia su pelo.
Dos seres unidos. Dos almas creando sinfonías, cuya belleza sólo puede apreciarse en la tierra entre el sueño y la Vigilia. Nunca una melodía había expresado un sentimiento tan puro y verdadero.
Pensando en ella escribo. Siento. Sueño. Dormido o despierto.
No importa que pase, no importa cuanto camino recorra, siempre me lleva a ella.
A menudo paseo, cogido de su mano, por esbozos de aquel que soy, de aquel que seré, de aquel que pude haber sido.
En el día más brillante la miro, y si me abandona, será la noche más oscura.
Pinto los cielos con su nombre, usando las estrellas como pincel.
De nuevo la pierdo, para volver a encontrarla, rodeada de mis más íntimos sueños.
Quiero surcar su alma con este frágil bajel construido por mis temblorosas y ansiosas manos.
Oír como la tempestad acalla su rugido al pronunciar su nombre. Saber que allá dónde mis pasos me lleven, ella estará.
viernes, 26 de septiembre de 2008
Splinter (nada que ver con la rata de las Tortugas Ninjas)
¿Qué me decis gente? ¿Os animais?.
Aqui os paso el enlace a la noticia en cuestión. Splinter
jueves, 25 de septiembre de 2008
Miedo
Pero lo que más me aterra, es no poder vislumbrar tu rostro. Soñar contigo y que aunque te mire a la cara, no pueda verte.
miércoles, 3 de septiembre de 2008
Regreso
Tras varios días de caminar y 210 kilómetros recorridos (que se dice pronto) ha vuelto de tierras gallegas el equipo de exploración del Huhtamaqui Squadron, compuesto por el incansable montaraz Victor, el veloz semi elfo Said y vuestro anfitrión, el carismático beornida Kanon... también venía la joven padawan Maite-chan.
El viaje, espectacular. Debo reconocer que el primer día estaba muerto, hasta quería volver, porque estaba reventado. Pero decidí seguir adelante. Tras varios días de caminar, por paisajes dignos de J.R.R. Tolkien o Gary Gygax, conseguimos llegar a nuestro destino en Santiago de Compostela. Hubo etapas más duras que otras, pero la recompensa merecía la pena. En nuestra mente quedan grabados los paisajes que hemos visto, las anécdotas del camino (perlas de Maite incluidas), la gente que hemos conocido y la gastronomía (aún se me caen dos lagrimones cuando recuerdo el entrecot de ternera al queso de Arzúa).
No me arrepiento para nada de haber ido, es más, estoy seguro que de haber vuelto o no haber hecho el Camino, me habría arrepentido. A mis compañero de viaje sólo puedo decir, gracias. Ha sido alucinante. Hay que repetir.
jueves, 24 de julio de 2008
La Cosa va de... Recuerdos III
por pesadas sombras, ocultas bajo un manto de tristeza.
Tristeza que aborda mi alma
vaciando de esperanzas y sueños todo mi ser.
Ser mortal, teñido por lágrimas y sangre,
fruto de una vida castigada.
Más dura resulta,
pues su ausencia aumenta mi angustia.
Sin coraje ni valentía,
avanzo por los campos arrasados de mi orgullo
harto tiempo quemados.
Pírrica victoria sin tu esencia.
Aún sin luchar, pierdo cuando gano.
sábado, 5 de julio de 2008
lunes, 26 de mayo de 2008
Un día más, un día menos.
La verdad es que estoy algo depre, no se muy bien por qué. Supongo que es un cúmulo de cosas. Por fortuna, siempre hay motivos para despertarte por la mañana: la familia, los amigos, la música... Una vez afirmé que la música me tiraba más que las mujeres. Obviamente, hubo más de uno que se sorprendió, incluso que me dijo que mentía. No es así. Quiero decir, que hasta el momento no he encontrado a la mujer que me haga vibrar, temblar y sentir como la música. De sobra es sabido que soy bastante enamoradizo, pero ansío aún amar y que me amen. Joder, que cursi soy a veces. A ella, si estas en alguna parte, aún te espero, y aunque deba sufrir en el camino, no creo posible dejar de hacerlo, pues una parte de mí, aun cree que existes.
Bueno, quiero compartir con vosotros un tema que creo que es de los mejores en la historia de la música. No, no es Stairway to Heaven de Led Zeppelin. Se trata de un tema del que se han hecho múltiples versiones: Knockin' on Heaven's Door de Bob Dylan.
Mama, take this badge off of me
I can't use it anymore.
It's gettin' dark, too dark for me to see
I feel like I'm knockin' on heaven's door.
Knock, knock, knockin' on heaven's door
Knock, knock, knockin' on heaven's door
Knock, knock, knockin' on heaven's door
Knock, knock, knockin' on heaven's door
Mama, put my guns in the ground
I can't shoot them anymore.
That long black cloud is comin' down
I feel like I'm knockin' on heaven's door.
Knock, knock, knockin' on heaven's door
Knock, knock, knockin' on heaven's door
Knock, knock, knockin' on heaven's door
Knock, knock, knockin' on heaven's door
viernes, 14 de marzo de 2008
La Hermandad
"Ha llegado el momento, hermanos." Los siete se miraron. Se pusieron en pie y contemplaron el paisaje. A sus espaldas, las Montañas Heladas, con sus picos, tan altos como el cielo, fundiendo las nubes con la nieve que las vestía. Frente a ellos el valle del Destino, el lugar de peregrinaje de toda su gente. Todo miembro de
Los siete se miraron.
Moccdul esperaba en su caballo, Trueno, escudriñando el horizonte; junto a él, Loukd cogió su espada, Sidewinder y montó sobre Orcrist, un unicornio; Attni, cogió sus cosas y las echó sobre su montura, un enorme oso negro llamado Tundro; Craehls esperaba de pie mientras acariciaba a Ventisca, un caballo alado; Nanko, sentado sobre Krynger, un enorme dientes de sable rojo, ajustaba a su espalda a Segadora, una enorme espada dentada; Rostaiv, terminó de enfundar su espadas cortas: Aguijón y Mordedora y montó sobre Ares, un enorme guepardo; el último en subir fue Katnu, quién montó sobre Sora, un hipogrifo.
Una vez todos montaron, apareció por el horizonte Garuda, el halcón de Moccdul, posándose sobre su hombro.
“Debemos irnos. Las hordas de las Tierras Yermas avanzan. Debemos reunirnos con nuestros hermanos.”
Echaron un último vistazo, y marcharon a su destino.
miércoles, 20 de febrero de 2008
sábado, 2 de febrero de 2008
Jimi Hendrix Experience
martes, 29 de enero de 2008
8 -Bits Never Dies




8-Bits Never Dies!!
viernes, 25 de enero de 2008
La Cosa va de... Recuerdos II
Sentado en mi cama, iluminado por una pequeña lámpara de estudio y con el aire de un ventilador dándome de frente escribo esto.
Quizás los considero mejores, pero tal vez porque los veo con nostalgia. Nostalgia por amigos que ya no veo, por cosas que pasaron, nostálgico por cosas que no pasaron y querría que sí. Nostalgia tal vez por la inocencia perdida, por el niño que murió hace tiempo. ¿Quién puede ser niño en un mundo dónde hasta los hombres son aplastados?
Que viejo me siento a veces. Es como si cargara el peso del mundo sobre mis hombros, como Atlas, que sostiene la bóveda celeste. Tal vez sea miedo. No, sin duda es miedo. ¿Pero miedo a que? A una vida aún por vivir que, por finita que sea, siempre puede ser más. Miedo al olvido, a la no existencia. Miedo a todo… y a nada. Quizás tras estas letras mi alma puede descansar, o más bien desahogarse. Hacer que una a una las lágrimas limpien mis ojos, acaricien mis mejillas y duerma tranquilo.
Sólo la noche es mi compañera, la luna mi guardiana, las sombras mis vigías y el mundo, mi escenario.
sábado, 19 de enero de 2008
Debo despedirme
“Debo despedirme” Piensa para sí. Sabe que por mucho que la quiera, ella no siente lo mismo. A veces se tortura, pues cree que ambos podrían ser felices juntos. Luego ve cuanto se equivoca. Por mucho que signifique para él, las diferencias entre ambos son grandes.
Así pues, con amargura, guarda en un cofre sus sueños, deseos y esperanza. Cierra el candado con una llave forjada con las lágrimas derramadas. Mira el horizonte, mientras el sol se pone iluminando el mar del Olvido. Respira, mira el cielo pidiendo entereza y arroja el cofre. “Debo seguir adelante. Será duro, y me costará, pero debo olvidarme de tí, aunque al hacerlo muera una parte de mi ser”.
Tras hacerlo, vuelve a caminar por el camino solitario, en pos de un destino aún incierto, con la sensación de haberse arrancado una parte del alma. Se detiene, y mira de nuevo al horizonte. “Debo superarlo. Con el tiempo todo volverás a su cauce. Debo despedirme” Un lágrima recorre su mejilla. Se gira y continúa caminando, con la sola compañía del viento, susurrando su nombre.
“¡Apártate!” grita al viento “Debo seguir adelante” El viento cesa, acaricia su rostro y lo abandona. Él continua caminando, alejándose del mar, pidiendo fuerzas para avanzar. Quien sabe si lo consiguió.
viernes, 18 de enero de 2008
La Nueva Academia Jedi
P.D. Una partidita de Star Wars no?